martes, 29 de abril de 2014

para las nuevas generaciones 2002 ¡¡ cuantas faltas¡¡

PARA LAS NUEVAS GENERACIONES 2002-01-19 VOY A CONTARLES UNA HISTORIA VERDADERA PARA MIS HIJOS, LOS NIETOS, PRIMOS,SOBRINOS E HIJOS ,ES LARGA INTERESANTE, PARA LOS QUE CREN QUE ESTA ES LA PEOR EPOCA......NO .......SEÑORES....... Iba a nacer un ñiño los vecinos preparaban el agua caliente llamaban a la partera ,las abuelas todo listo el nene o la nena va nacer nada de sanatorio en las casas en el zaguán o en cualquier parte debía nacer .SIGLO- 20. La casa de la glorieta,de la parra ,en toda la ciudad ,el violeta del jacarandá adornaba el cielo como un encaje de color violeta es la primavera que despertó con sus colores y el perfume. Las glicinas enroscadas en el árbol de tilo y cuando,los días pasaban buscando el verano el jacarandá alfombraba las veredas con su color , ahora celeste violáceo, Una puerta cancel un llamador de bronce ,dos coronas de novia formaban un arco a la entrada ,unos escalones una galería que cubría el patio y en el costado derecho una huerta para todos .Una sala con balcón por donde se veía la calle, y dos cuartos. Y doblando a la izquierda había dos cuartos mas pequeños, en uno Farida le alquilaba a un Polaco solterón y gruñón,y en el otro vivía. Doña María y su hija Isabel dos personas muy interesantes.Siempre tenían la frente despejada y dos, hermosos rodetes sobre la nuca Ellas hablaban el Español .En la habitación del medio vivía Doña ECHE ella tenia cinco hijos viuda, cuatro mujeres y un varón que puso en el asilo venia una vez por mes cuando la mama podía juntar las monedas para ir a buscarlo, Y en las dos salas vivía doña Farida Y don Raúl y siete hijos, Al fondo estaba la cocina popular y comunitaria un baño con el agujero en el medio que todos los chicos tenían terror cuando pasaban al baño los escuchabas llorar De un costado y bien al fondo ,la pileta de losa en la cual todos tenían, que lavarse y lavar toda la ropa Por la mañana el desfile de padres vecinos niños haciendo la cola para lavarse trayendo su trapo o toalla en las manos FARIDA Y RAUL venían de MEDIO ORIENTE solo una hija había nacido allí vino con los documento FRANCES y los demás somos todos argentinos.Lo mas hermosa de esta historia era la solidaridad las sonrisas de las mañanas, la necesidad de ayudarse unos a otros saber la urgencia de cada uno para el uso de la pequeña cocina de carbón y el aguante a un solo baño o parecido a un baño .Compartían, lo que tenían arroz azúcar pan o jabón o lo que fuera la cuestión estar unidos, en la pobreza de esa época doña Farida no permitía que nadie dijera que es pobres .Nosotros, no somos pobres tenemos conocimiento decía con fuerza en mi país era rica aquí no hay trabajo pero tenemos inteligencia Todos eran comprensivos ,menos don,, era un hombre huraño ,y de mal genio los chicos le teníamos mucho miedo ,se ponía mal cuando FARIDA, le lavaba las sabanas y le validaba el cuarto ABRAHAM trabajaba de sastre Isabel la española ,se iba muy temprano a trabajar y mi mama se dio cuenta que ella era una sirvienta de alguna casa muy distinguida. Un día recuerdo como hoy, cuando Isabel llamo a mi mama y le dijo puedo llevar a su hija a pasar el día con migo a mi trabajo cual de ellas a la que siempre esta limpiando! A dice mi mama la que me roba la lavandina a no se dijo ISABEL yo la veo que va buscar arena de la obra,y ella me dice que con eso lava los cubiertos me llamo la atención MATILDE dijo mi mama ella no se de donde nació en cuna de oro ESE día jamás lo olvidare , mama me puso el vestidito que ella misma me coció con , la tela por una vecina que tenia bonos para retirar unas telas de la fabrica de los hermanos TEUBAL que daban trabajo a 1000 obreros que tenían por lo menos eso, trabajo ,Sin distinción ni de razas ni credos , MAMA tenia que hacer una cuadra de cola ,y los paquetes estaban preparados yo la acompañaba ,y mis ojos brillaban de alegría de ver como se llevaban el tesoro para los hijos, nadie sabia que iba encontrar. De allí salió el vestido que me había puesto, tengo la foto Ella había traído una planchita de SIRIA que a su vez era de FRANCIA.Con ella nos hacia los rulos o nos alisaba el pelo y además nos pintaba los cachetes sin ningún reparo.Decía es para mostrar linda cara, nosotras teníamos vergüenza.MAMA agregaba, no van a morir por eso ERAN tiempos malos que podía entender con mis cinco años Pero ella con su instrumento musical traído de su tierra natal interrumpía ,la falta de comida de trabajo de ropa de calzado , tomaba el DERBEQUE y tocaba alguna canción de su pueblo ,con lagrimas que caían sobre sus dedos nos obligaba a bailar Bailen hijos aquí no hay guerra.Aquí la tierra es limpia no hay sangres siembra y come Yo veía que sus dedos se alargaban y parecían mágicos Y de repente se acordaba que yo tenia que ir con ISABEL y pronto iba saber donde trabajaba ,la españolita mas linda del barrio .Llego el domingo por la mañana, tenia que estar lista muy temprano cuando todos dormían no hubo necesidad de despertarme yo no había dormido en toda la noche ,mi curiosidad Y la sensación de lo desconocido .Era las siete de la mañana.ojos abiertos petacona, coqueta pizpireta Tomada de la mano de Isabel iba saltando por la calle Gaona Mercedes, llegamos a una casona de ladrillos color ocre una casa de dos plantas con jardín garaje agarra manos de bronce puertas de cedro escalera de mármol. ISABEL toco el llamador de la puerta que no era la principal Salió un señora, recuerdo que era muy linda yo me escondía detrás de la pollera de ISABEL La dueña se llamaba JULLETA, En cuanto me vio dijo al fin la trajo esta es la nena que limpia todo ,si señora , respondió ISABEL bueno ponga un plato y cubiertos para que coma con nosotros .Me pusieron una silla alta vino el esposo y me presentaron los dos me besaron algo que nunca había recibido en la casa de mi mama no había tiempo para esas boberías ISABEL dijo señora JULLETA ella puede comer en la cocina ,faltaba mas dijo don LORENSO MATILDE come aquí y si quiere quedarse hay lugar ,y tiene un cuarto lleno de juguetes De pronto sentí que no, que no iba ver a mis papas me asuste y no quería comer ellos ya sabían que yo no comía carne por religión Y además no sabia usar los cubiertos pero solo me vasto verlos ,a ellos y comencé a imitarlos ,los dos bocados primeros volaron al piso me puse colorada y ellos dijeron parece una manzana .Después de un rato me acostumbre al lujo .Comí poco y me bajaron de la silla así me sentí libre CINCO AÑOS y los ojos y mi sentidos bien abiertos para conocer cada muebles adornos porcelanas oro plata que muchos años después supe los valores que tenían para que se utilizaban Fue el primer impacto de mi vida . Y desde ese momento supe que había otro mundo Costumbres camas de bronce manteles de hilo bordados cortinados sillones dorado a la hoja arañas con decenas de caireles cristales porcelanas alfombras PERCIAS TAPICES DE LA INDIA columnas doradas y negras ,cuadros traídos de Europa con marcos dorados escaleras de mármol fileteado en oro, personal de servicio una habitación muy grande las paredes cubiertos de libros con tapas duras con los nombres en dorados .Volví de la mano de ISABEI VOLABA me sentía en vuelta en una nube hinchada no se si era emoción a esa edad no sabia distinguir sensación, entre en mi casa había enmudecido estaban todos los chicos de la casa y los del barrio no quería hablar tenia lagrimas en los ojos los miraba a todos sin zapatos los vestidos remendados con mocos que le colgaban sobre la boca y algunos rascándose la cabeza por los piojos si algo aprendí por la exigencia de mi mama,fue la limpieza .Ella decía no hay plata pero hay brazos y cabeza y cada uno de nosotros teníamos que hacer algo a mi me gustaba tener todo limpio los productos era la tierra la arena y el papel Y ahora los chicos acosándome querían que les cuente ,donde estuve que hice no podía hablar ,ERA otra vida otras costumbres esa oportunidad que me brindaron ,entre todos los niños de la zona de floresta El secreto me lo guarde no era el lugar es como estar en el cielo y ver esta gente que me estaba apretando y que estaban aglutinados sucios hermosos inocentes Y, que hicieron conmigo me cambiaron mi cabeza todo lo que había visto ese día quedo dentro mío lleno de confusiones ,Pero la realidad era esta casa con la puerta sin llaves sin rejas sin mesa ni cubiertos descubrí, seguí siempre jugando con los niños y limpiando, era un placer para mí tener todo limpio, pero ya no era la misma niña, la vida continuaba, a mi mamá le decían la bruja porque era vidente. Se juntaba mucha gente en el barrio para que mi mamá les solucionara los problemas, leía la borra del café, tiraba las cartas, decían en la casa de las glicinas hay una mujer que sabe muchas cosas, yo escuchaba lo que decían es una vidente, no había dinero, no había televisión, no llaves en las puertas, no teléfono, no juguetes, si se escuchaba el canto de los pájaros, había un perro de policía, todos los gatos del barrio, la risa de los niños, los llantos, las peleas, tironeándose de los pelos, o sacarle la muñeca de trapo o robarles las figuritas de colores. En las tardes las madres se iban a ser algunos mandados, o visitar algunos de sus parientes y especialmente a sus madres, todos los chicos tenían vía libre para hacer todo, todo el barullo que quisieran. Las niñas se ponían los zapatos de las mamás, los chicos los sombreros y salían a la puerta hacían rueda, bailaban a las escondidas,al gallito ciego, todos jugaban al doctor con mucha picardía. Cuando volvían las madres siempre había uno que avisaba ahí vienen las viejas y ellas apenas tenían 30 años. Había que ver como en un segundo se dispersaban todos los chicos, parecían como las palomas del Congreso que cuando se les acerca alguien vuelan todas, las niñas se pintaban los labios así que estaban escondidas sacándose la pintura indeleble, así transcurrían los días de la década del 30. Se oía por ahí que la situación era la peor que estaba pasando el mundos¿ y que era el mundo para los chicos?. Las personas mayores no sabían leer, solo eran rumores o las reuniones en el café jugando al dominó o al bagamon Los inmigrantes se contaban sus cosas, falta de trabajo, la marginalidad, los problemas, muchos no tenía una moneda partida por la mitad, entre ellos se ayudaban, se reunían, tenían nostalgia de su país natal, se habían escapado de la guerra del 14 y ahora estaban sufriendo los despidos, la falta de trabajo, de los años 30. La comida era pan mojado que mi madre ponía en una olla de barro, se ponía aceite le agregaban mezclado con agua por lo menos así tenía espesor, los vecinos sabían que había algunas gallinas, todo el mundo las llamaba la casa de las glorietas, y en cada pedazo de tierra que tenía las casa cada uno de los vecinos sembraba, zapallo, berenjena, menta, tomate, y todas las semillas que encontraban las secaban y las preparaban para otra temporada. Que alegría cuando se veían los primeros brotes, unos llamaban a otros, para que disfruten del nacimiento de algo que luego les serviría para compartir y comer. Entre todos los vecino aunque no eran de la casa crearon una huerta que cuidaban como si fueran los hijos, las casas eran bajas y cuando el cielo era claro, parecía que se podía tocar con las manos. Muchos domingos los hombres ayudaban a sacar los yuyos, poniendo nuevas plantas, regando, mientras las mujeres con el delantal puesto sobre la falda se habían acriollados porque cebaban mate y conversaban. Algunas casas más allá habían coches Ford del año 20, que cada dueño con los hijos y manguera en mano los lavaban, le pasaban el trapo hasta que brillaba como para verse la cara. En la tarde parientes, amigos se juntaban, todos ellos habían emigrado en el mismo barco, hablaban el mismo idioma, hacían las mismas comidas, tenían los mismos sufrimientos, festejaban, las mismas fiestas, iban al mismo templo. Los sábados eran sagrados, a partir de las 4 de la tarde del viernes no se podía tocar la luz, antes de las 4 se prendían las velas, se preparaba una mesa con unos tablones, se ponía en la mesa el vino hecho por mi mamá y se esperaba la llegada del sábado. Los hombre iban al templo y las mujeres y los niños los esperaban con lo mejor que tenían. En la madrugada del viernes, todas las madres preparaban el arroz, era la mejor ofrenda para recibir a Shabat puesto en la mesa tapado con un tul. Recuerdo a mi madre que se ponía un hermoso collar de perlas, mientras ella recorría el patio de la parra y las glicinas, venía cantando las canciones de la llegada del día espiritual, por suerte recuerdo su voz que era una de las voces más lindas que he oído en la vida, una voz tan hermosa que mi padre se casó por estar enamorado de su voz. Lo hermoso de esta historia a pesar de que eran17 en la casa, la limpieza el orden que había en o toda la casa a los chicos les encantaba estar descalzos, jugar en el agua, cuando baldeaban el patio y cuando llovía en la vereda jugaban con la tierra y el agua. Cuando volvían del templo todos los chicos alrededor de la seudo mesa y más de un vecino venían con las ollas de comida para compartir, nunca estuvieron solos¡¡¡ Farida. Tenían un patio largo y un corazón grande para recibir a toda la gente. Los chicos creciendo y comienza la preocupación porque sabían que tenían que anotarlos en la escuela. Era una época en que los hombres, salían con un atado en sus hombros llevaban mercadería, que los parientes y paisanos que habían llegado antes,, de medio oriente y que lograron poner una tienda de ramas generales ....ellos ayudaban a los que comenzaban recién y no tenían dinero, le fiaban solo de palabra, como el almacenero, el farmacéutico, la verdulería todos era por palabra y a los chicos les regalaban confites...... El barrio era de musulmanes y judíos compartían como hermanos, costumbres, comidas, canciones y el idioma, mamá decía somos primos hermanos, la hospitalidad era igual, se compartía todo lo que se tenía y discutían entre ellos que comida tenían que sabor, se contaban anécdotas de su país natal. En la casa de Farida, nada se tiraba, todos se usaba, utilizaba las cáscara de fruta para hacer dulce, era tradición que en la casa de los árabes tenía que haber una bandeja con dulce puesto en un pote y anís turco. Aunque sea las 7de la mañana cuando venía cualquier persona, con solo una mirada de mi madre yo tenía que acercarles las bandejas y servirles, había que llevarlo en el tiempo justo, porque sino es como si se lo estuviera echando. Por las mañanas se oía el tintineo de las vacas que venían a las puertas, todas las madres estaban con las jarras o ollas, o latas para que le ordeñaran la leche, los chicos gritaban que tetas gordas que tiene, leche blanca, espumante y caliente, todas las madres sonrientes en la puerta y con el delantal puesto, ahora el tema era la escuela, pocos eran los que sabían hablar bien el castellano, Doña Eleonora era italiana, Doña Ester era de Grecia doña Celma egipcia. Farida de Siria, solo Doña María era española de Galicia, pero todos se entendían aunque sea balbuceando y aunque sea con señas, pero siempre alegres y sonrientes. Desde mi corta edad veía como respetaban a las personas mayores, para mí eran todos corpulentos, viejos y difícilmente las madres en los días de la semana se sacaban el delantal de cocina, siempre tenían el aspecto de que estaban haciendo algo, en realidad trabajaban mucho, en la cocina, sin elementos, con poco dinero, por suerte en el barrio había un verdulero musulmán que abastecía a las dos colectividades, una excelente persona, la mitad de verduras y frutas las cobraba y la otra mitad la regalaba y los que no podían pagar no les cobraba, Essen se llamaba, había que ir muy temprano, sino al mediodía todo se terminaba. En la calle San Eduardo había un gran horno para hacer pan, se hacía pan árabe y cuando tenían plata, todos los vecinos llevaban carne para hacer como una pizzetas que se llamaban esfijas, poco tiempo después se oía el trote de unos caballos, los chicos salía corriendo, era el panadero, se colgaban del coche y que los lleve a dar una vuelta, querían llevar las riendas del caballo. Cuando Don Juan vendía el pan, los llevaba a dar una vuelta de lo contrario, los chicos se quedaban con la boca abierta. A medida que iban creciendo, iba cambiando las cosas, o el estilo de vida, el pan venía en una bandeja grande de ese horno y lo consumían ya sea judíos o musulmanes. Luego empezó a venir la panificación argentina con todo tipo de pan, facturas, flautas, panes de leche que se vendían por unidad. Cuando podían compraban un pan redondo tostado por afuera y con mucha miga adentro que se usaba para las comidas. Don Juan venía cantando pan caliente, blanco y redondo para cortar con los dientes. Llegó el día para anotarse en la escuela y un grupo de madres buscaron la escuela más cercana para anotar a sus hijos, los chicos iban con ellos, nadie sabía hablar bien el idioma, pero trataban de hacerse entender, los chicos revoloteaban en el patio de la escuela, quiero decir que sentía mucho miedo era como sacarnos del cascarón o del clan para ira lo desconocido, era muy difícil entenderse, tal es así que todos mis hermanos tenían distintos apellidos. Había unas pizarras grandes donde estaba escrito lo que había que traer el primer día de clase, para mí todas las maestras eran gordas y feas bajitas .Las madres volvían pensativas no sonreían hablaban entre ellas en voz baja los niños todo el día descalzos invierno verano jugaban al almacenero con la tierra Y en otros momentos todos los chicos cazando mariposas corriendo detrás de alguna porque el farmacéutico del barrio nos decía si encuentran alguna el ,don MAZONI nos iba a regalar confites de colores Ya al atardecer FARIDA nos retaba por los sucios que estábamos Ya tenia el tacho en la cocina con agua que había calentado en el calentador de kerosene ,a bañarse¡ yo primero ,yo decía el otro basta¡¡¡ pegaba un grito ,como siempre, primero los varones y nosotras comentábamos en vos baja los preferidos Ya casada le pregunte porque los varones los quería mas y siempre ellos Con esa forma segura que tenia hasta que murió me dijo.. Venga siéntese Los varones tienen alas en cualquier momento se van como tu padre a los 20años dejo a sus padres y vino AMERICA y nunca los volvió a ver creo que nunca supo nada de ellos Pero las mujeres hechas raíces y vuelven a la casa de los padres .Yo los quiero a todos igual son como los dedos de la mano si me cortan uno duelen todos .,, Con hilo cisal nos frotaba el cuerpo como si lavarara la ropa en la tabla que tenia en el pileta ,y en la cabeza nos ponía kerosén por las dudas tuviéramos piojos Hoy tenemos la comida de los príncipes nos decían lentejas con arroz decía para que fije el hierro QUE ADELANTADA ERA..¡¡ Estábamos todos en la cama cuando llego mi papá lo oía mal la situación nadie tiene plata el se había hecho una clientela pero ahora las cosas eran peores todas las mañanas bien temprano salía con un atado de mercadería que dejaban en distintas casas ,que ya eran clientas les pagaban semanalmente a ellos le decían allí viene el marchante en todas las casas que visitaba¡¡ las puertas no tenían llaves .Las mujeres los hacían pasar les servían agua fresca sacada del pozo los invitaban a sentare y a que se lavaran la cara, ya eran conocidos, Le dejaba, sabanas batones toallas pañuelos calzoncillos con la explosión de la década del 30 ya no había ni un peso por mas gentileza de los clientes no había plata Llego el momento de pensar de donde sacaban los delantales para la escuela los zapatos Farida no durmió en toda la noche Raúl o Chaud como le decían , se puso furioso cuando Farida le comento lo de la escuela No tenemos para pagar el alquiler nos van a echar a la calle en cualquier momento decía mi papá , como siempre yo me hacia la dormida y escuchaba las discusiones Ellos como en secreto ,Pero yo estaba alerta tenia miedo ,, fue algo que me domino mucho tiempo y siempre terminaba llorando y soñaba que estaba con Isabel en aquel paraíso, tan lujoso y ahora mis papás estaban discutiendo no dormían en toda la noche, mama se levantó temprano, juntó a algunas vecinas que estaban discutiendo porque nos iban a echar a la calle. Farida se pintó los ojos con el cojol que ella misma se preparaba y decía hay que arreglar la pieza porque no sabes quien la pisa y pinta tus ojos que no sabes quien te mira ,y muy temprano se fue a la escuela, ella iba con la idea firme de poder conversar con la directora como sea porque no sabía como hablar, balbuceando con gesto, con mímica que para eso era muy especial. Ella no le tenía miedo a nadie porque decía consulta al más grande y al más chico y volvé tú pensamiento. Farida logró con mímica y con señas que entendiera la directora que la pobreza superaba todo. Farida logró que le dieran los delantales abrochados adelante como para marcar que lo usarían los chicos pobres y los zapatos del estilo Guillermina que también te señalaban , a los chicos que eran pobres . (30 años más tarde esos zapatos se pusieron de moda). La vecina logró lo mismo gracias a la seña de mi madre y el tesón que tenía para conseguir las cosas. Farida puso la máquina de coser y con una ropa vieja que traían se puso hacer pañuelos, eran tan espantosos que mi hermana y yo lo tirábamos antes de llegar a la escuela (eso me sirvió para que nunca me saliera un moco). Llegó el día de la escuela, llegamos temblando llorosos con la ropa del asilo y escuchábamos las voces de las maestras gordas, viejas y feas, la directora que nos hacía formar fila, una campana sonaba y los niños tenían que tener un pañuelo en la mano, mostrar las uñas y nos retaron porque no teníamos el pañuelo, con un lápiz nos revisaba la cabeza para ver si no teníamos piojos, y nos levantaban el delantal para ver si la bombacha estaba sucia. Década del 30 un párate total, todo el mundo sin trabajo, las pocas fábricas cerradas, suicidios, nadie sabia leer, pero se escuchaba rumores que se avecinaba la década del 40 y que Hitler estaba matando a todos los judíos y nuestros vecinos nos decían que nos iban a venir a buscar y con mis hermanos nos metíamos debajo de la cama. Una tarde vinieron unos hombres con la policía y nos sacaron los bártulos que teníamos a la calle. Mi mamá lloraba, imploraba pero no hubo forma, lo mismo les sacaron a los inquilinos. En esa época nadie pensaba en el futuro solo querían vivir el aquí ,y el ahora y tener un poco de comida de cada día y como yo era más despierta de todos mis hermanos mi mamá me dijo sentate arriba de los muebles y no te muevas de allí ,no vuelvo hasta , encontrar un lugar donde ir a vivir, tarde ya mamá encontró un departamento en la calle Cuenca 853, allí vivimos hasta que nos casamos. Mi padre nos sabía leer, traía un diario y lo miraba al revés pero como era tan inteligente que con solo verlo ya sabía las noticias, nos decía como estaban todos los judíos, y no sabíamos a donde íbamos a parar, pero el tenía esperanzas y muchas ilusiones, era un hombre soñador, bohemio, un sibarita, era muy exquisito, no teníamos un peso, pero el quería todo fino, limpio y distinguido. Pero los chicos seguían jugando en la calle con una pelota y las chicas con una muñeca de trapo jugaban al almacenero a vender y a comprar la mercancía era la tierra.. El desastre mundial se avecinaba velozmente, los chicos seguían con su inocencia, lo padres haciendo conjeturas con los parientes, vecinos, con los que hablaban mismo idioma ¿QUÉ ERA EL FUTURO?, Solo sobrevivir por el temor que llegara Antisemitismo a la Argentina y nos metieran en la cámara de gas. Una tarde vino corriendo mi papá y dijo vamos a ganar la guerra porque están los tres grandes Winston Churchill Eisenhower Montgeomery. El Mariscal Marshall mi papá, hablaba mucho del plan Marshall y son grandes estadistas, después nos dijo ya desembarcaron los aliados en Normanda, ya termina la guerra. Las consultas se hacían con Roosvelt y así terminó la guerra y entonces vino otro sistema EL PERONISMO. FIN Matilde Yadid me gustaría el que pueda leer este mensaje sepa que nuestra pobreza era solo por falta de trabajo pero muy digna y estoy orgullosa de haberla vivido ¡¡¡¡¡mi madre fue un ejemplo de sabiduría de honestidad y respeto a los derechos humanos ¡¡¡¡¡ y si volvería a nacer quisiera vivir exactamente igual Matile Mi padre fino distinguido por naturaleza nos inculco la higiene y los buenos modales Otro día voy a contar el impacto de la bomba atómica ¡¡¡¡¡¡¡ MatildeYadid La contemplación 2007-7-6 Un día me di cuenta que solo éramos¡¡ Pasajeros del mundo. Allí detuve mi marcha. Al oír un grito profundo, desde mis viseras, Que me decía ¿A donde vas? ¿Que buscas? Corriendo no lo vas a encontrar La vida te envuelve te ciega te quita, Desde que nacemos la protección de los padres. La escuela la sociedad nos va creando de

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